El uso de drones elimina la necesidad de transportar y montar andamios, escaleras y otros equipos de acceso, reduciendo así tanto los costos como el tiempo requerido para las inspecciones. A diferencia de los métodos tradicionales, que implican largos períodos de preparación, configuración de equipos y procesos manuales de recopilación de datos, los drones pueden reducir significativamente el tiempo necesario para llevar a cabo las inspecciones. En general, la planificación y ejecución de inspecciones con drones requiere un tiempo mínimo. De hecho, estas inspecciones pueden ser planificadas y realizadas en menos de una hora, en comparación con los días o semanas que pueden requerir los métodos manuales tradicionales.
Una mayor eficiencia en el tiempo conlleva una detección más rápida de problemas o áreas que requieren atención. Para la gestión de activos o proyectos de construcción, los drones ofrecen una manera eficaz de reducir tanto el tiempo como los costos asociados con las inspecciones y el mantenimiento. En general, esto resulta en una reducción del tiempo necesario para evaluar estructuras y tomar decisiones críticas, como realizar reparaciones antes de que se produzcan fallos costosos.